martes, 16 de octubre de 2007

La historia de Cecilia Solás(19). Una blogonovela cubana.

Anno 2002.
Capitulo 5. Somos como somos.

Sarita regresó al trabajo esa tarde después de visitar al doctor, y allí se complicó de mala manera. Hernán no había vuelto a llamarla y eso la tenía contrariada.

Cuando al fin pudo terminar las pruebas intensivas del nuevo sistema de facturas por Internet del cual ella era Jefe del Proyecto Técnico, se sintió aliviada. Al menos su vida profesional le brindaba efímeras recompensas. El sistema funcionaba superbien, y ella sabia que esto representaría mayor prestigio técnico y posiblemente un ascenso en el salario.

Se sentía tranquila en su trabajo, pero muy preocupada Algo andaba mal, y ella tan experta en probar sistemas y reformarlos hasta que funcionaran a la perfeccion, no acababa de comprender porque su sistema, el suyo, su vida personal, estaba llena de parches, desvios, ciclos infinitos, en fin, un total desastre, algo que cancaneaba y cancaneaba sin ella por primera vez ni siquiera imaginarse que fallaba en el mecanismo.

Se sentía sola, vacia, y su esposo de tantos años, Hernán, ya no le parecía el hombre con el que había compartido 25 años de su vida. Cambiaba por día, y ella también. ¿Para bien o para mal?. No sabía. Eso la contrariaba mucho, no saber exactamente qué le estaba pasando. Ella que siempre había tenido cualquier respuesta en la mano, se sentía confundida. Tremenda mente confundida.

Llegó a la casa tarde, pasadas las 10, los muchachos ya dormían. Vivía muy pendiente de ellos, aunque siempre de manera discreta para que no pudieran constatar su angustia interna y a la vez no se sintieran acorralados.

Cuando llegó a la casa Hernán había comprado algo para comer todos, a Sarita no le gustaba la idea de comprar comida hecha, pensaba que era una mala opción alimenticia y se sentía culpable por no disponer del tiempo para cocinar para su familia de una manera sana y nutritiva. Y a Hernán le parecía una maravilla eso de no tener que cocinar, solo llamar por teléfono y ya.

- Hola mi amor, traté de llegar antes pero no pude, sabes como es eso.…

- Se te nota cansada, mira compré pizza. Quiero enseñarte algo a ver que piensas.

- ¿Pizza?, no pudiste elegir algo mejor, ¿por qué no me llamaste?, sabes que no es bueno comer tanta pizza, me hubieras llamado ¿Qué me quieres enseñar?

- ¿Para qué?, para que me dijeras eso mismo, mira si no quieres pizza, entonces prepárate algo tú. A nosotros nos gusta. Ya se te olvido lo del carro nuevo que voy a comprarme.

- ¿Nosotros?, bueno… si, eso haré estoy tan cansada, y me siento tan asustada, ni hambre tengo a decirte verdad. ¿Tú?, ¿vas a comprarte otro carro?

- ¿Por qué asustada? … chica que mala memoria… hoy te dije que estaba viendo carros.

- Por lo que me dijo el médico hoy. ¡Ah! Si el carro….otro más…

-¿Qué te dijo?, ¡Pero sigues con eso! Ya te dije que no le hicieras caso. Eso de que te vas a morir es una exageración, mira si le empiezas a dar taller a eso si que te vas a morir. Mira come algo y ven para que veas el carro - dijo apuntándole a la labtop que descansaba en sus piernas.

- Pero Hernán, yo me siento mal, tengo una angustia muy grande, me siento muy cansada y todo me preocupa, eso no es normal.

- Pues mira peor para ti, si sigues así entonces es verdad lo que dijo el médico, te vas a morir, jajajajaja …..

- Por Dios Hernán que me siento mal, no juegues, no bromees, me siento muy mal. Como nunca.

- Mira, Sara, llevamos 5 años en este país casi, vives mejor que lo que soñaste en tu puñetera vida, manejas un carro de lujo y del año. Tenemos dinero de sobra y te vienes a quejar que te sientes mal. Si sigues empecinada en eso no se si pueda aguantarte por mucho tiempo, aquí se viene a luchar y a salir adelante, no a ser una carga.

- ¿De que hablas Hernán?, si trabajo como un hombre, hasta mas que tú. Si llevo 5 años sin pensar en mi casi, pendiente de tus necesidades, tus preocupaciones, tus hipocondrías, tus enfermedades imaginarias. Los muchachos. Mis padres enfermos. ¿Y me sales con esta?, ¿pero quién te crees que eres?, ¿por qué no miras a tu alrededor y te comparas con los demás para que veas cuanto nos falta por llegar y no solo me refiero a bienes materiales Hernán. Tu arrogancia, ese delirio de grandeza que estoy tratando de sobrellevar hace tiempo, y ahora que por primera vez me siento mal, me siento enferma ¡y me sales con esta!. Si al menos tuviera aquí a Cecilia o a Casandra o a alguna amiga con la que conversar y desahogarme y no recibir criticas.

- Pues si chica, ojala que tuvieras a alguien que te aguantara porque yo no te voy a aceptar críticas y mucho menos letanías o cantilenas, y mira a ver que si quieres seguir conmigo tienes que echar para alante y dejarte de blandenguerías.

- ¡Hernán! … te veo y cada vez te reconozco menos, será que siempre fuiste así y no me había dado cuenta. Mira, primera y última vez que te hablo de cómo me siento. Y tienes razón, aquí se vino a echar para alante y no a dejarse vencer. Gracias por el consejo, lo tomaré en cuenta. Pero no te confundas tú no eres rico, tienes un salario y ya. No eres rico Hernán no seas fatuo.

- No me hables así Sara, sabes que no me gusta nada cuando te pones así, a mi no me metas miedo.

- ¿Miedo?, ¿y para qué quiero darte miedo? Hernán, el miedo no come aquí, ¿no dices eso siempre?… quizás es que deba empezar a mirar la vida con otros ojos, si, quizás. ¿ sabes cuanto puede costar un par de ojos nuevos como esos que tú tienes?

- Tus ironías me cansan Sara

- Y a mi tu ceguera, Hernán. Vete a la mierda y déjame en paz

- Sara, no te permito….

- Permitirme ¿qué?… mira, va y en seis meses ya no tienes que aguantarme más, según el médico, o quien sabe si esto es un aviso de Dios ….

- Sara… no me chantajees…..

- Y tú Hernán, no me jodas…. (continuará)

9 comentarios:

lola dijo...

Ese Hernán es un hp, que sólo se mira el ombligo, así que Sara lo mejor que hará será mandarlo con viento fresco.
Saludos

parejanoverbal dijo...

Bueno, bueno...ya va apareciendo el conflicto...ella le dice tengo angustia y el le dice por que si tienes de todo. que le faltara a sara..?

Anónimo dijo...

sabes q estoy esperando las poesias. En lo q te inspiras les saludo por aquí.Gaviotazalas

GeNeRaCiOn AsErE dijo...

ah, los conflictos del Capital... te confieso q a veces me han dan dado ganas de coger carretera y no parar hasta North Carolina...

Yo soy Medea dijo...

Hernan y Sara son un subproducto de lo que sabemos ... ya veran por que.

Tony, tu crees qwue en North Carolina es distinto?, avisame que me mudo volando!!!

Anónimo dijo...

Hi, nice blog, nice work. here in North carolina we have a swingers club...all of you guys are bienvenidos...! XO

General Electric dijo...

Jajaja

como me he reído con swingwithme... la palabra North Carolina debe haberlo atraido... y sin leer cree tener la solución para los problemas de Sarita y Hernán: "Swing with me"... quién sabe... maybe they should give it a shot. [>o) ]

Tremenda amargura que hay en ese matrimonio... vaya que un par de tardes de la semana en el happy hour, por lo menos, es algo que deberian intentar

GeNeRaCiOn AsErE dijo...

A bailar y bacilar con la 'swingfonica'
estatal de north Carolina!!!

'swingwe' con tu emotiva nota me recuerdas a una canción infantil,
tal vez un mensaje encallado en las reminiscencias de mi latency

y dice mi estribillo...

amiguitos vamos todos a swing-r.

Ivis dijo...

Mede, te confieso que no había tenido tiempo de seguir tu blogonovela como Dios manda, pero resulta que entre ayer y hoy me he anclado a la silla y ya estoy actualizada (y de paso, enganchada).
Felicidades, eres una narradora excelente y muy amena, además, ese capítulo que tanto te elogiaron es realmente sensacional.
Eso, que haya estreno pronto, que yo voy desde aquí para verte.
Saludos.